UN VIAJE LITERARIO POR CAMINOS Y VEREDAS DE LOS CORREGIMIENTOS




“Cada libro, cada tomo que ves, tiene alma. El alma de quien lo escribió, y el alma de quienes lo leyeron y vivieron y soñaron con él.” Carlos Ruiz Zafón en la Sombra del Viento



 Por Diana Carolina Valencia Figueroa
Promotora de Lectura
Sistema de Bibliotecas Públicas de Medellín 
 
Para nadie es un secreto que la lectura nos transporta a lugares fantásticos y desconocidos de los cuales no quisiéramos, el libro es el puente que nos lleva inevitablemente por esos mundos maravillosos, a nosotros como lectores. Dice  Daniel Pennac en su libro cómo una novela sobre el libro y el lector, “Sin él, su mundo no existía. Sin ellos, él quedaba preso en la espesura del suyo. Así descubriría la virtud paradójica de la lectura que consiste en abstraernos del mundo para hallarle un sentido”*.
Partiendo de este párrafo introductorio y gracias a esa pasión por la literatura es que nos atrevemos a promoverla en nuestros sitios de trabajo. En primera instancia, porque no decirlo, cumpliendo a la labor descrita en un contrato; pero no se desconoce, que de aquella labor nace, en el corazón, un amor especial por los usuarios o beneficiarios que atendemos cada día. Uno de esos grupos poblacionales más atendidos y a la vez más vulnerables del servicio bibliotecario, desde las bibliotecas corregimentales, son las Instituciones Educativas y los habitantes de las veredas lejanas a la biblioteca, quienes, el acercamiento a la biblioteca, como espacio físico, les es mínimo, por no decir nulo.
Teniendo en cuenta lo anterior,  es importante resaltar que la labor de proyección bibliotecaria en estas veredas, no sería tan efectiva sin tres condiciones fundamentales que sostienen este servicio. Como primer punto, es importante tener la suficiente pasión para adentrarse a los lugares más recónditos de los corregimientos, lugares invadidos de una marea verde que guarda en sus profundidades seres maravillosos y puros; en un segundo plano estarían los materiales bibliográficos, cargados de historias ansiosas por ser leídas por los niños y niñas que habitan estos lugares y, tercero, contar con un medio de transporte que facilite el desplazamiento por las veredas de los corregimientos…Aunque, es preciso aclarar, que los pies han sido también los guías incansables para poder arribar estos caminos puros y limpios...Además no se puede dejar de lado que durante nueve meses, en cada uno de nuestros vientres, crecía y también nos acompañaban dos pequeños seres mágicos, que disfrutaban enormemente estas caminatas, lo evidenciaban dando pequeñas pataditas en la barriga de las futuras madres promotoras de lectura.
Esta actividad de promoción de lectura**, se ha convertido para nosotras en toda una aventura vivida una vez por semana, la cual inicia desde que tratamos de elegir los mejores libros, desde la objetividad y no desde la subjetividad, sin cánones de por medio, sólo el libro y el lector por gusto propio... para que sean realmente de gran disfrute por los niñas y niñas que esperan ansiosos en sus escuelas. El reto para nosotras es seleccionar acertadamente dichos libros, libros que los hagan soñar, reír, y por qué no, llorar...Es todo un rito la selección del libro, recorrer las estanterías de la sala infantil y, uno a uno ir tomándolos, guardarlos sigilosamente en la tula que se les entregará cargada con 50 historias, subirse al carro con la maleta al hombro, llena de los libros elegidos que viajarán por caminos empedrados, fangosos, empinados y estrechos; llegar a la escuela y escuchar los gritos desproporcionados de los pequeños detrás de las mayas de los patios escolares: - Profe, profe, ¿qué nos trajo hoy? ¿Qué libro nos va a leer? ¿Puedo coger algunos?...Quisiera que fuera de miedo o de risa - …Ante este recibimiento, tan solo podemos mirar a los pequeños, sonreír y continuar el paso; dejarlos con la inquietud latente para seguir el protocolo de rutina, verificar cada libro con la docente y empezar a expresarle los recomendados a viva voz y sugerirle actividades que puede hacer con cada libro para su grupo de niños y niñas.
Finalizada esta labor de verificación, inicia la mejor experiencia del rito, entrar en cada salón con uno o dos cuentos seleccionados y leerlos a toda voz a cada grupo, verles las caritas con sus ojos fijos en el libro que reposa en nuestras manos, sus manitos empuñadas esperando que comience la historia que los hará vibrar. Definitivamente esta imagen que ellos nos muestran hace que nuestros corazones aceleren su latido más fuerte, porque la emoción también nos invade a nosotras, recorriendo cada centímetro de nuestros cuerpos, como dicen algunos. Ahora empezamos a cantar con ellos, porque el saludo es muy importante y, que más que con el canto para que ellos se relajen un poco, controlen la ansiedad del cuento y se dispongan a disfrutarlo con tranquilidad.
Iniciamos ahora con el vuelo de la imaginación, la lectura en voz alta tiene un poder mágico en los pequeños, incluso en los más grandes, en los docentes; quienes inmediatamente disponen su cuerpo en un estado mental de relajación, la respiración de los oyentes es pausada y tranquila, están a la espera, pero de pronto, por arte de magia, el ritmo del cuento cambia es acelerado, ¡oh, no!, hay un difunto que nos da escalofrío, o un personaje en peligro seguro...por eso la respiración de todos se acelera a la espera de descubrir un final feliz.... “¡Cómo nos gustaba asustarlo por el puro placer de consolarlo!”*Decía Pennac. Es muy especial ver como cada uno nos mira y se adentran  en la historia y la viven realmente, tanto, que una vez terminada, quedan en silencio, Así lo expresa Pennac “¡Gran gozo del lector, ese silencio después de la lectura!”* Quedan, como en una regresión, aterrizando a la realidad del momento...”Como olvidar esta intimidad, tan incomparable”* Pero, saben, una historia nunca es suficiente para saciarles la sed de escuchar cuentos, poesías o chismecitos, como  a veces se les dice, por eso debemos siempre, como promotoras de lectura, estar armadas, armadas de libros, de cuentos y de historias; no piensen mal…para continuar calmando la sed que los invade, misión casi imposible, porque siempre querrán más, y colorín colorado, este cuento se ha acabado, y colorín, colorete este cuento esta de rechupete, y fararin fararán, este cuento ha llegado a su final, o más bien este cuento acaba de reiniciar...Porque saben, cada uno de nosotros tendrá siempre “Sus relaciones privadas con Blancanieves o con uno cualquiera de los siete enanos”*, o con Choco, o El señor cretino, o Pepe, o Greta la loca, o el pobre de Juul que nos despierta sentimientos encontrados…En conlusión, queríamos plasmar en este texto lo fascinante que es para un promotor de lectura tener UN VIAJE LITERARIO POR CAMINOS Y VEREDAS DE LOS CORREGIMIENTOS DE MEDELLIN


¡Gracias!

GLOSARIO

**Promoción de lectura: “Es cualquier acción o conjunto de acciones dirigidas a acercar un individuo o comunidad a la lectura, elevandola a un nivel superior de uso y gusto; de tal forma que sea asumida como una herramienta indispensable en el ejercicio pleno de la condición vital y civil” Yepes Osorio, L. (2004). La promoción de la lectura: Conceptos, Materiales y Autores. Medellín: Comfenalco


BIBLIOGRAFÍA

*Pennac, D. (1993). Cómo una novela. Bogotá: Norma

**Yepes Osorio, L. (2004). La promoción de la lectura: Conceptos, Materiales y Autores. Medellín: Comfenalco
***Alcaldía de Medellín. (2006). Valores y diversidad cultural en la literatura infantil. Medellín: Alcaldía

Comentarios

Entradas populares de este blog

BIOGRAFÍA LECTORA

LOS INICIOS DE LA LITERATURA INFANTIL

SÚPER CAPERUZA CAYÓ